Conócenos

Rimcave nace en 2025 como resultado de un cúmulo de situaciones, coincidencias y, sobre todo, de una ambición compartida. Detrás del proyecto estamos dos jóvenes, Aleksei y Rubén, que decidimos dar el salto para crear algo que no solo nos apasione, sino que también nos motive a crecer, aprender y madurar como personas y como emprendedores.
La chispa que encendió todo fue la idea de unir dos mundos que nos han acompañado desde siempre: el motorsport y el emprendimiento. Dos caminos que, a primera vista, parecen muy distintos, pero que comparten algo esencial: la pasión por superarse y la obsesión por cada detalle.
Desde pequeños, el mundo del motor nos ha fascinado. No solo por la adrenalina de la velocidad o el rugido de un motor a punto de alcanzar la perfección, sino también por la belleza de las máquinas, por esa sensación de tener tu pequeña joya mecánica en el garaje, cuidada con mimo, lista para salir a rodar. Nos atrae la meticulosa mecánica que convierte piezas y engranajes en movimiento, la búsqueda incansable de ganar milésimas de segundo, de acercarte un poco más al contrincante, de encontrar la trazada perfecta.
Y junto a esa pasión por el motorsport, siempre estuvo el impulso emprendedor: el deseo de crear algo propio, de dejar huella, de sentir orgullo por un proyecto que nace de cero y crece gracias al trabajo, la dedicación y la visión. Para nosotros, Rimcave no es solo una marca, es una forma de unir nuestras pasiones en algo tangible, que transforme una idea en una experiencia, tanto para nosotros como para quienes confían en lo que hacemos.
Cada producto que creamos es único. Trabajamos con piezas auténticas procedentes de monoplazas y componentes que han formado parte de la historia real del circuito. Neumáticos que han rodado en competiciones y entrenamientos, materiales que llevan consigo la esencia de la pista y que transformamos, de forma artesanal, en piezas exclusivas para nuestros clientes.
Rimcave es, en el fondo, un viaje. Un camino que empezamos en 2025, sin garantías, pero con la certeza de que lo que hacemos tiene alma. Queremos que cada persona que adquiera uno de nuestros productos sienta que lleva consigo un pedazo de historia del motor, y que entienda que detrás de cada creación hay horas de dedicación, cariño y respeto por este deporte.
Esto es solo el inicio. Igual que en una carrera, sabemos que cada vuelta cuenta, que siempre hay margen para mejorar, y que lo importante no es solo llegar a la meta, sino disfrutar del recorrido.
Aleksei y Rubén